Locro
El locro es una de las comidas más tradicionales de la cocina argentina. Actualmente es muy común disfrutar de éste plato en los días en que se festejan las fechas patrias. La base de éste plato típico es el maiz blanco, con el que también se prepara mazamorra. El locro tiene una fuerte ascendencia incaica (proveniente del Imperio Inca) hay muchas variaciones del locro, y cada mujer de tierra adentro tiene su propia versión, la mía particularmente no lleva mondongo ni tripas.
Aquí la receta:
Ingredientes
2 tazas de maíz blanco pisado seco remojado de la noche anterior
1 cucharadita de bircarbonato
1 kg de carne de pecho (brisket) cortada en trozos medianos
4 chorizos de cerdo enteros
1 taza de porotos blancos
300 grms de zapallo
1 cebolla grande picada
1 ramito de perejil
2 choclos limpios cortados en rodajas medianas
2 batatas cortadas al medio
1/2 taza de grasa de animal (lard)
2 cebollas de verdeo picadas
1 cucharada de morrón
1 cuharadita de ají picante molido
Sal y pimienta a gusto
Preparación
Para empezar éste plato tan sabroso primero elejimos la cacerola más grande que tengamos y la llenamos con 5 litros de agua y la ponemos a calentar. Cuando rompa el hervor agregamos el maíz blanco remojado de la noche anterior, se cocina por una hora a fuego mediano. Luego, añadir el bircarbonato, ésto permitirá que el el maíz quede aún más tiernos y así podrá absorber los jugos de la carne. Cocinar por 2 horas sin desatender, para que el maiz no se pegue en el fondo de la olla. Revolver seguido. Cuando las dos horas hayan pasado, se le agrega la carne y los chorizos pinchados para que no exploten, los porotos, el zapallo, la cebolla, el perejil, las rodajas de choclo, y las mitades de batatas. Continuar el hervor suave por una hora y media más. Probar carnes y porotos, deberían de estar tiernos. Servir con una fritura hecha con la grasa, cebollita de verdeo y morrón diluído con un poquito de agua y el resto de los condimentos. Llevar a la mesa caliente en salsera aparte, ya que no a todos les gustrá lo picante. ¡Buen Provecho!
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